El candidato a intendente por la UCR, Ramón Mestre, ha planteado públicamente la propuesta de devolver a manos privadas la recolección de residuos en la mitad de la ciudad de córdoba con el supuesto objetivo de reducir costos y mejorar el servicio.
Lamento informarle que está partiendo de un profundo desconocimiento acerca de uno de los problemas fundamentales de la gestión municipal, tanto en nuestra ciudad como en la ciudad de rosario, que pretende tomar como ejemplo.
En primer lugar, es necesario recordar que en nuestra ciudad la creación de la empresa Crese a fines del año 2008 se debió al fracaso de la licitación, debido fundamentalmente a que los costos que implicaba aceptar las propuestas de las dos empresas privadas oferentes era directamente insostenible para el municipio. Las propuestas privadas implicaban una erogación mensual de 38 millones de pesos a fines de 2008, siendo que la empresa Crese se hizo cargo del servicio a un costo de 14 millones de pesos mensuales.
Si hacemos una proyección del aumento de los costos operativos, de insumos, laborales, etc. que llevaron a la empresa Crese a operar en la actualidad a un costo de 24 millones de pesos mensuales, las empresas privadas estarían operando a un costo de 54 millones de pesos por mes.
Estamos hablando de una diferencia de más de 350 millones de pesos por año, que deberían salir de las arcas municipales y, en definitiva, del bolsillo de los vecinos de córdoba.
Justamente este mayor costo que implica la gestión de este servicio en manos privadas, ha sido el factor determinante para que la ciudad de Rosario, ante la imposibilidad de afrontarlo, haya avanzado en el año 2009 en la creación de un Ente Estatal que hoy ya se hace cargo de la recolección en un tercio de la ciudad. Incluso en ese momento fuimos convocados por el intendente Miguel Lifschitz, quien tomó la experiencia de la empresa Crese como un elemento determinante para avanzar en Rosario. Rosario tenía hace 2 años la totalidad del servicio en manos privadas, y hoy está avanzando en el porcentaje de participación del Estado, no al revés como plantea el Dr. Mestre.
Está absolutamente demostrado que los costos que implica dejar el servicio en manos privadas son mayores e incluso en términos de eficiencia las empresas privadas han estado por debajo de los niveles de conformidad que hoy expresan los vecinos. Los costos laborales y la “presión” gremial son idénticos, salvo que en el caso de la gestión privada se debe añadir su ganancia.
Cualquier intendente tendrá en sus manos la designación de la totalidad del directorio de la empresa Crese, lo que implica la posibilidad de un fuerte control sobre el servicio y sobre los costos, en función de una política integral municipal.
No existen razones económicas ni de calidad del servicio que fundamenten seriamente el planteo de la re-privatización. La posición del Dr. Mestre sólo es entendible en el marco de un profundo desconocimiento de la gestión de este servicio y sus costos; o bien por compromisos políticos con empresas privadas, que seguramente no pueden explicarse a la luz pública.
No hay comentarios:
Publicar un comentario